Luego de
permanecer dos años en la Primera B Nacional, el equipo charrúa logró el
ascenso a la máxima categoría del fútbol argentino al vencer por 2 a 1 a Atlético Tucumán en el
estadio Gabino Sosa, siendo de esta manera el segundo equipo en lograr el tan
ansiado ascenso por detrás de Huracán.
El equipo
conducido por Ricardo Palma salió a disputar su encuentro sabiendo que una
victoria lo colocaría en la Primera División, debido al empate entre Instituto
y Ferro Carril Oeste. Desde el primer minuto de partido, el equipo rosarino
salió a buscar los tres puntos. Sin embargo, Atlético Tucumán se paró muy bien
en el campo de juego y al charrúa le costó encontrar los espacios para marcar
la diferencia. El primer gol del encuentro llegaría a los 36 minutos del primer
tiempo, luego de una buena combinación entre Fiorina y Lezcano que culminará
con la definición de este último y el 1 a 0 parcial.
Ya en el
segundo tiempo, el partido se hizo trabado y el conjunto tucumano logró
aproximarse en varias ocasiones al arco de Leguizamón. A los 17 minutos de la
etapa complementaria, Atlético Tucumán llegó al empate luego de un córner y un
buen cabezazo del jugador Barone. A partir de ese momento el partido se hizo de
ida y vuelta, y los arqueros de ambos equipos fueron decisivos para mantener la
igualdad. Sin embargo, a los 28 del segundo tiempo un contraataque bien
manejado por Martín Mustachi le permitió a Salinas convertir el segundo gol de
Central Córdoba, que pasaba a ganarlo nuevamente.
El equipo
rosarino logró cerrar bien los espacios y de esa manera llevarse los tres
puntos para lograr el ascenso. El pitazo final del árbitro Álvarez desató la
alegría del conjunto charrúa que luego de muchos años en las otras divisiones
del fútbol argentino logró volver a la máxima categoría.
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