Tras
aproximadamente once horas de viaje, el Papa Francisco descendió en el aeropuerto
de Río de Janeiro, donde lo esperaba Dilma Rousseff para dar sus primeros pasos
en el continente.
Bergoglio será esta
semana el protagonista de la Jornada Mundial de la Juventud, un festival de
misas y peregrinaciones para promover la evangelización que podría atraer a más
de 1,5 millones de católicos de todo el mundo.
"La juventud
es la ventana por la que el futuro entra en el mundo“, dijo el Papa.
Vitti, Santiago
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